Comprobar el límite del tiempo
Allá donde el silencio se congela,
Y extender una mano cálida que lo derrita
Para entender lo efímero,
Para sobrevivir al paso de los momentos.
Corroborar la escalada del miedo
Allá donde el grito se congela,
Y explicar al monstruo su delicadeza,
Para suplir lo trágico,
Para divisar la valentía.
Quizá entre palabras,
Allá donde todo se dice,
Haya un instante de visiones,
Para comprender,
Para vivir lo inexplicable.