martes, 30 de diciembre de 2014

dicen



dicen que de tanto esperar el amor murmura como un loco en la esquina del alma;
y que si alguien miente por amor le crecen alas;
y que cuanto más lejos nuestros cuerpos más cerca nuestras almasalas;







jueves, 25 de diciembre de 2014

como quien no quiere la cosa...



Escribir de la nada algo
y dejarlo caer sobre el papel,
escribir desde la tinta la letra
que acaricia tu alma,
profesar la prosa en el margen
de una oración abandonada,
escribir como quien no quiere la cosa
sino la palabra,
y dejar que se vayan las sombras
a su triste mundo de silencios.










domingo, 21 de diciembre de 2014

sábado, 20 de diciembre de 2014

Diziembre





Había un mes especial del año, cuando la ciudad más ciudad se llenaba de festejos. Tan ciudad era la ciudad que hasta corría un río contaminado entre dos puertos y varios aeropuertos. Era una urbe atestada de ascensores que llegaban al piso cuarenta y cinco siempre. En aquel mes que todos esperaban, la ciudad más ciudad se apagaba para que se encendieran ellos y su sueño de ser pueblerinos se hiciera realidad. Entonces las luces de neón, las heladeras, los aires acondicionados, los ascensores, se callaban durante un mes entero, mientras todos los ciudadanos festejaban con antorchas y velas, cantando a los gritos por las calles, comiendo, bailando. Dicen que de esas fiestas interminables nacieron leyendas que nadie escribió, que algunas señoras mayores se vestían de hada para correr a sus nietos hasta la plaza, y que algunos ancianos de caciques, y otros tantos de saltimbanquis o marionetas.