el mar a tus pies
sábado, 17 de mayo de 2025
Dios también llora
sábado, 10 de mayo de 2025
misericordia
Y si fuera cierto
El milagro de vivir
O las veces que moriste
En la alcantarilla
Cuando el frío se llamaba hambre
Y no sabía leer
Yo le tengo miedo a las alas de la noche
Al perfume de tu risa
A la compasión sin pasión
Vigía
Vivo del sueño
me alimento de mariposas
correteo, apaciento
y construyo otro mundo
dónde somos menos frágiles
Mi vigilia me vigila
salta la valla y se esconde
sabe
y hay otro sol al borde
otro dictado de
Dios
caracoles
Agua de las primeras olas
Que llegan a la orilla
Y chocan contra el alma
Es la fe que nos mira
Y nos reconoce
Que el filo de mi palabra no te hiera
Sobran razones
Falta corazón
Mi diario son tus ojos
La noticia llega lejos
Nació el caracol
lunes, 5 de mayo de 2025
martes, 29 de abril de 2025
CONSIGNA 5 - 2
Me perdí en la
multitud. Soy la sal del sudor. El entusiasmo del niño. La parca recién
levantada lavándose la cara. Soy el espesor de un camino hecho de piedras que
se abren a mi paso. Me place huir por callejones sin salida para enfrentar a la
bestia. Y levantar el teléfono y hablar con Dios.
lunes, 21 de abril de 2025
para vos papito! vuela alto
nuestro mar de orilla a horizonte de arena a caracol fundiéndose, fundándose al pie de un monumento que cae en el yeso de tu sonrisa
viernes, 11 de abril de 2025
Cuidado que anochece
He decidido desenmascarar a la luna. Puedo ver como pergeña vanidades, como derrota al sol, como aniquila el día y recrudece el espanto; el lobo lo sabe. Todo lo que comienza inevitablemente termina, la luna se mofa de eso. Guarda las miradas de los amantes y de los asesinos, de los que viven a la intemperie y de los que se pasean sonámbulos por sus balcones, de quienes la miran tímidamente por la ventana. No sólo guarda las miradas si no también los pensamientos. La memoria es un suspiro, es un ocaso y la luna se aprovecha, está escribiendo un largo memorandum del mundo.
jueves, 10 de abril de 2025
ejercicio de taller
Poema
La sombra de un cuerpo trae el infierno de tu nombre,
y una duda dormida en un sueño de miradas,
y una profundidad que se mece en cuna de tierra como la mar,
los pasos no avanzan sin un alma,
los recuerdos nadan en el cuerpo,
los pescadores apresan madrugadas,
la sal seca orillas,
las redes siempre esperan.
Primera persona
Estoy en la playa y el sol es un infierno que hace mi sombra,
alguien me mira mientras duermo, el mar está bravío, ese alguien
camina hasta la orilla, avanza hasta la escollera, parece no tener
alma, mis recuerdos flotan a la conciencia, es un pescador, hay sal
en la orilla, tira las redes y espera.
Interrogante
Por qué una playa y un sol que es un infierno, por qué mi sombra
mientras duermo, por qué el mar bravío, por qué la orilla y el
pescador que parece no tener alma, por qué recuerdo y el pescador
tira las redes y espera.
Declaración
Estoy en la playa sí, mi infierno se parece al sol, duermo sobre la
sombra mientras el mar bravío llega a la orilla y el pescador que no
tiene alma, recuerda tirar las redes y esperar.
Tercera persona
Hay un cuerpo al sol en la playa, parece un infierno de sombras con
el mar bravío quejándose, en la orilla la sal molesta al pescador que
parece tirar redes y esperar.
Si hay un sol hay un infierno
Si hay un sol hay un infierno, y sus sombras. Si hay un mar bravío
hay un pescador; la sal seca las orillas, pero él se acerca y tira las
redes porque si hay redes hay peces y entonces espera.
miércoles, 2 de abril de 2025
Las ciudades invisibles
Almagro acontece de pie, en las orillas de los pozos hacia abajo, en
esquinas, baldosas, cuartos, en su diario cubrirse de diarios. El águila crece
en las alturas, y la vemos. Sí, no un águila sino un aguilucho. Cuando los
niños duermen el hada recita cuentos sola y la duda se apila en los estantes.
Cada túnel tiene su destino negro, y es ir hacia algún lado, a cielos
prohibidos, con alguna fe comprada en el sur. En el mármol los diversos
quijotes son altos, en el laberinto de las agonías, su fuego, sus leones, el
destino de ser como una rosa. Desde el remoto tiempo, acontecen decires
presurosos, divinidades premiadas, devenires de templanza, que conviven con el
crepúsculo. Así, entre palabras que forjan una escalera significativa, suben
los mundos paralelos. Esos que en Quito y Muñiz chocan con el
vecino de la esquina.
Las pisadas indebidas, la estúpida suerte librada al deber, apariencias
que conmueven, que creen saber el fin de sus medios y el comienzo de sus
miedos. Despegada de la palma de su mano esa caricia que funda esta ciudad,
dictada de palabras que son tu nombre, alejada del fastidio y devuelta a una
frontera escondida. En la guerra, nuestro combate privado, una idea que del
alma nos acerca al nosotros aunque todas las verdades desaparezcan.
De la mano del decir encuentro tu recuerdo como si la tinta diera el
salto de lo oscuro, de las sombras, a la arena del eco en la orilla de la
memoria. Ya está hecho el ahora de manos que tejen, de miradas, de momentos, del
perfume de tus rocas, soledades, del fondo más pesado del espíritu, un oasis
que inventa desiertos. Y el final que se desmaya en el humo, y duerme entre tus
brazos.
Un espejo vino a verme, el futuro pasó alguna vez por la puerta, y
entró.
sábado, 15 de marzo de 2025
viernes, 7 de marzo de 2025
Whisky!
Fui esa mujer que te mira desde la foto, mis ojos los dejé retratados para vos. No fue fácil. Me
tiré de un renglón del poema al cemento de tu corazón para morir aplastada por el odio. Ahora
sigo en otro cuerpo, el cuerpo que nunca tocaste.
Soy la sombra que me sigue en la oscuridad de la calle, una obra inacabada en tu bolsillo de
pobre que juega con las armas de la resurrección. Me fui haciendo libre en un catálogo. Ahí
donde un like pesa más que el paso de un soldado por la puerta. Sagrado es verme correr la
liebre del campo inventado en una foto de instagram para que me aplaudan. Porque al final se
corre el telón y estamos desnudos viendo un público infame. Me tiro tomates que junto para
la ensalada.
Sigo escribiendo la peste que evito para que así nos tenga miedo y no ocurra. Me fui una vez
de la puerta de la felicidad para caminar por el precipicio de la maldad y te deseé la muerte,
Raquel, sin saber que ya estabas muerta. Cuando lo supe tuve piedad. Quise revertir mi
hechicería pero era tarde. Tu cara murió en un gesto que quisiste congelar en el tiempo. No
estás más debajo de ese rostro. Y miro tu foto y no estás. Borraste tu cara del álbum de
figuritas y se repite la tarde vacía en mi almanaque.
Cuantas fotos nos congelan pero no saben que forman parte del futuro. Cómo vamos
distinguiendo las almas de los cuerpos. Y somos un rayo de luz en una lente que no hace más
que cerrarse y abrirse como un diafragma inepto. Me cobijo de la luz con la oscuridad de tu
roce. Somos estacas que pelean porfiadas sus finales.
Whisky!
lunes, 3 de marzo de 2025
el roble que nos espera
Hay leones que
rugen como lobos
que sacan sus
espaldas
y pelean en la
arena del tiempo
Los leones son cruces de acero
reyes de un
imperio dorado
inmortales,
sempiternos
y yo les ofrendo la carne de un cordero
que quita los pecados del mundo
Los leones se
esconden de la multitud
como el aguilucho
que busca el gorrión arrepentido
y vuela por la
casa
Los leones se llevaron los restos de mi
vida
y comieron mis recuerdos
bajo la sombra del roble que nos espera
miércoles, 5 de febrero de 2025
...
no hay abismo sino tus ojos
no quiero espanto sino tus manos
ábreme la boca con la palabra
y
líbrame un acta de infracción por manejar soñando
que las estrellas bajan lento al regazo de mi madre
muerta
lunes, 3 de febrero de 2025
viernes, 31 de enero de 2025
Para vos Gustavo!
veo un puente
de vacío a vacío
de vos a mi
de las nubes a la tierra
del río al mar
del sueño al escaparate
lo cruzo con los ojos cerrados
y toco el horizonte